El tomate es conocido como verdura/hortaliza, cuando en realidad se trata de una fruta.
Sus orígenes se remontan a las costa occidental de Sudamérica y se introduce en Europa durante el siglo XVI.
Al ser introducidos en Europa, se cultivaba la variedad de tomates amarillos, pero posteriormente los rojos se hicieron mucho más populares.
¿Sabíais que según la wikipedia en el centro de México recibe el nombre de jitomate? ¡pues yo no!. ¿Será cierto?.
Posee licopeno (un tipo de caroteno) que le confiere el color rojo, un potente antioxidante; fibra, agua, vitamina C y E, la quercetina, minerales como potasio, fósforo, calcio, magnesio y hierro.
Su temporada óptima de consumo es durante los meses de verano y existen infinidad de variedades.
Tomates cherry, tomates pimiento, tomates de rama, tomates pera, tomates Raff, tomates de Montserrat, tomates híbridos, etc, etc, etc.
Se puede consumir de infinidad de maneras, en ensaladas, en sopas, en gazpacho, seco, marinado, etc.
La verdad es que estoy esperando una deshidratadora y cuando la tenga, si aún quedan tomates, me podré a deshidratarlos como loca!
Así durante el invierno si me apetece los podré consumir.
¡Os dejo una deliciosa sugerencia!
No hay comentarios:
Publicar un comentario